El macizo de Anaga es una formación montañosa y región histórica del nordeste de Tenerife, de las que descienden profundos valles y barrancos que van hasta el mar, formando numerosas playas, muchas veces sólo accesibles a pie o por barco.
El Macizo de Anaga es un Espacio Natural Protegido con una extensión de 14.418 hectáreas que ocupa gran parte del noreste tinerfeño y está formado por zona de costa, barrancos, bosques y pueblos tan remotos que parece asombroso que alguien pueda vivir en ellos. Se trata de un paisaje natural protegido con una belleza impresionante y está repleta de recodos y lugares recónditos que le deleitarán y sobrecogerán.
Aquí verá lugares de interés paisajístico y natural, como los Roques de Anaga: unas interesantes formaciones rocosas en el mar que la erosión ha ido moldeando. Están considerados como los monumentos naturales de la isla.
A pesar de toda esta gran belleza, el mágico Macizo de Anaga permanece aún casi sin explorar y sus pequeños pueblos están fuera de las principales rutas, con lo que se le revela un “Tenerife Oculto” en todo su esplendor. En algunas de estas villas aún hay gente viviendo en cuevas: ¡visítelas, pase un rato y descúbralo!